Los vehículos eléctricos “NEV” representan un gran reto para su producción, debido al rápido crecimiento y los avances tecnológicos para mejorar su rendimiento. Siendo la optimización y reforzamiento del chasis “Body in White” (en espacio y estructura debido al peso adicional de los puntos de montaje de las baterías y otros componentes relacionados con el tren de potencia) parte fundamental para la revolución de la movilidad.

Por ello, la implementación de materiales más ligeros y resistentes (aleaciones de aluminio) y la fundición a alta presión “HPDC” han sido utilizadas para la fabricación de componentes estructurales más grandes y complejos, obteniendo una mayor rigidez y una disminución en el número de piezas, ensambles y peso total.